En anteriores artículos de este blog hemos tratado multitud de cuestiones relacionadas con las direcciones IP, pero no habíamos escrito concretamente sobre IP. En primer lugar y de forma muy breve, daremos unas breves pinceladas sobre qué es IP, para qué sirve y cómo son las direcciones actuales.
Una dirección IP es un identificador o número único que se le asigna a un equipo o dispositivo electrónico cuando utiliza el protocolo IP. “Dirección IP” proviene de “Internet Protocol”, traducido al español “Protocolo de Internet”; de esta forma, “Dirección IP” significa “Dirección del Protocolo de Internet”.
Aunque los dispositivos y equipos se conectan entre sí mediante sus respectivas direcciones para IP, para las personas es más fácil recordar un nombre de dominio que los números de la dirección IP. Los servidores de nombres de dominio DNS «traducen» el nombre de dominio en una dirección IP.
El protocolo empleado actualmente es el IPv4, si bien está previsto que sea sustituido por el IPv6 que proporciona muchas más direcciones IP que su predecesor, pero que aún no se ha implantado. En el anterior artículo Solución CGNAT escasez de direccionamiento IPv4 explicamos la problemática actual del direccionamiento IPv4 debido a la escasez de direcciones disponibles en ese formato.
Las direcciones IPv4 están compuestas de 4 octetos o 4 bytes, entre 0 y 255, escritos en el formato xxx.xxx.xxx.xxx. Los números de la izquierda indican la red y se les denomina netID (identificador de red). Los números de la derecha aluden a los equipos dentro de esta red y se les denomina host-ID (identificador de host).
Tipos de direcciones IP
Dinámicas y estáticas
Una dirección IP dinámica es aquella que cambia cada vez que se reinicia el equipo o dispositivo. La mayoría de las direcciones por defecto son dinámicas. Si quieres tener IP estáticas (o fijas), tendrás que configurarlo manualmente o solicitarlo a tu Proveedor de Servicios de Internet (ISP).
Los sitios de internet que por su naturaleza necesitan estar permanentemente conectados, en general tienen la necesidad de una dirección IP fija (se le conoce como IP fija o IP estática). Esta no cambia con el tiempo.
Privadas y públicas
Las direcciones públicas son indispensables para conectarse a internet, y resultan visibles para cualquier internauta; suele ser la que se asigna al router o al módem.
Las direcciones privadas solo son visibles desde una red interna, pero no desde internet. Se utilizan generalmente para identificar los puestos de trabajo de las empresas. Se pueden utilizar tantas como se necesiten; no es necesario contratarlas.
¿Qué clases de direcciones IP existen?
Las direcciones se organizan en clases A, B y C que son diferentes rangos de IP. Se utilizan las direcciones IP de una clase u otra en función del tamaño de la red en la que se vayan a usar:
- Clase A: direcciones IP que van de la 0.0.0.0 a la 127.255.255.255. Estas direcciones IP se usan para redes grandes, como empresas internacionales.
- Clase B: direcciones IP que van de la 128.0.0.0 a la 191.255.255.255. Estas direcciones IP se emplean para redes de tamaño mediano, tales como empresas nacionales, instituciones o universidades.
- Clase C: direcciones IP que van de la 192.0.0.0 a la 223.255.255.255. Estas direcciones IP se utilizan para redes de tamaño pequeño, es decir, empresas pequeñas o redes domésticas.
Existen ciertas direcciones en cada clase de dirección IP que no están asignadas y que se denominan direcciones privadas.
- Las direcciones IP privadas de clase A: 10.0.0.1 a 10.255.255.254 hacen posible la creación de grandes redes privadas que incluyen miles de equipos.
- IP privadas de clase B: 172.16.0.1 a 172.31.255.254 permiten la creación de redes privadas de tamaño medio.
- Las IP privadas de clase C: 192.168.0.1 a 192.168.0.254 posibilitan establecer pequeñas redes privadas.